6 oct 2011

No Ha Dejado De Doler

Si usted no ha leído “Querer y Dejarse Querer” le recomiendo que lo haga puesto que es la primera parte de este doloroso post. De todas maneras le refresco la memoria, así sin preliminares. Usted se quedó queriendo querer, a corazón abierto, vulnerable, sin ningún tipo de defensa y lamiéndose las heridas que le hizo aquella persona a la que no supo querer a tiempo. Usted ya consumo las promesas baldías del “todo va a cambiar” y de “no cometeré más errores”. Ahora quedan arrepentimientos, ¡cuántas cosas cambiarían si usted volviese atrás!. Y no dude que fue usted quien dejó marchar a la persona que amaba, que no luchó lo suficiente y que no la olvida aunque lo haya intentado todo.

¿Y ahora qué?
Se fue, se acabó, en ese jodido instante se da usted cuenta de que va a ser difícil olvidar a aquella persona que tanto le ha marcado, con la que tanto ha vivido, con la que tanto ha sentido y la que ha amado (y ama todavía)… Perdido. Es una sensación de vértigo, de vacío, acompañado de tristeza y tal vez de lágrimas. Y ahora solo le queda y le quedarán los míseros recuerdos que actuarán de narcótico, como un sueño. Usted  recuerde, tal vez sienta, pero no es real. Todo esto es puro opio y más madera para ese dolor que se está convirtiendo olvidar a aquella persona. Dolor de quererla y no poder tenerla.

En esos días, tal vez meses, usted la andará buscando entre tanta gente, intentando oler aquel perfume, su perfume porque solo es suyo, recordando sitios donde haya compartido algo con esa persona. Desesperadamente, usted se agarras con fuerza al algo que evoque tiempos pasados. Porque, sea sincero no hay un dolor mejor que el echarle de menos. Admita que no ha dejado de doler porque no ha dejado de querer, y no ha dejado de querer porque no ha podido olvidar. Porque si, aunque a veces quiera usted olvidar, la mayoría de las veces quiere usted recordar. Reconózcalo, a día de hoy si esa persona le dice ven… ¡Ay, si le dice ven!.

Conclusión “No, Gracias”
Puede que usted crea o no en las segundas oportunidades y reconquistas. No seré yo quien le rebata. Lo único que le garantizo es que toca ponerse en pie, sacar el orgullo (el bueno), ese que tan dañado ha quedado, aprender de lo ocurrido, buscar clavos que despecho o no le hagan olvidar (es duro pero es así) y volver a empezar.  Empezar porque afortunadamente aún queda mucho por vivir y deje al tiempo que trate de curar esa gran herida porque usted solo no puede. Aunque hoy, todavía…

4 comentarios:

  1. *Puede que haya más parte de este cúmulo de post.

    ** El homenaje al señor Jobs queda pendiente. Dicho queda.

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  2. "Hay que ser hombre para olvidar a una mujer, si no hay otra igual..." Andrés Calamaro, el pariente argentino

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  3. Pariente, gran frase la de nuestro pariente argentino, pero adquiere más relevancia si usted la cita. Sois Grandes!!!

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  4. Y si el querido se ve aliviado y se ha dado cuenta de que ha tomado una decisión acertada de algo que no era tan fácil?

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